Lost in Austen

Director: Dan Zeff

Guión: Guy Andrews

Año de producción: 2008

Reparto: Jemima Rooper (Amanda Price), Gemma Arterton (Elizabeth Bennet), Elliot Cowan (Mr Darcy), Hugh Bonneville (Mr Bennet), Alex Kingston (Mrs Bennet), Lindsay Duncan (Lady Catherine deBourgh), Morven Christie (Jane Bennet), Christina Cole (Caroline Bingley), Morven Christie (Jane), Tom Mison (Mr Bingley), Tom Riley (Mr Wickham)

Sinopsis

Desilusionada con la vida que lleva con su novio en el Londres actual, Amanda Price descubre a Elizabeth Bennet en su baño y antes de que se haya dado cuenta, está en el mundo ficticio de Orgullo y Prejuicio, llegando a la familia Bennet. Ahora que está atrapada en su libro favorito, deberá mantener el curso de la historia, pero también empieza a enamorarse de Mr Darcy. Mientras tanto, Elizabeth se queda en la época actual y parece que no está dispuesta a volver a la Regencia.

Crítica

Lost in Austen - Persiguiendo a Jane AustenLost in Austen (Perdida en Austen) presenta una variación original sobre las adaptaciones existentes hasta el momento, mezclándose con una trama posmoderna. El planteamiento de la serie es situar a un personaje contemporáneo dentro de una trama clásica que cree conocer, provocando un juego de comedia y enredo en el que triunfa. Así, la pretensión no es mostrar el texto de Austen al espectador moderno, si no que este espectador juegue con el texto a través de la figura de la protagonista Amanda Price.

La trama se basa así, en poner a una fan moderna de Orgullo y Prejuicio dentro de la obra y cómo su presencia va perturbando los elementos de la novela, hasta volverla inestable. Pero donde sorprende esta ficción, no es ya en esta perturbación de la novela conocida, si no en mostrar aquellos detalles desconocidos por la misma, e incluso enseñar un comportamiento en algunos personajes totalmente nuevo.

Así, se entiende que lo que ha pretendido el guionista y los responsables de este proyecto es jugar con lo que conoce el Austenita y burlarse de ello, parodiando la novela, pero también acercarse a un espectador que puede desconocer la cultura posmoderna que se ha creado en torno a Austen, o incluso a la autora.

Así, Amanda es un balance entre el espectador medio y el austenita, que al principio y por sus errores, puede parecer una Bridget Jones descolocada, pero no resulta así, pues adquiere su propia personalidad. Como si fuera la protagonista de una 'fan-fiction', este personaje va más allá de una Mary Sue (personaje perfecto creado por escritores anónimos dentro del universo de ficción que suelen idolatrar), y más bien es lo contrario, pues su comportamiento es siempre equivocado, lo que provoca el cambio de la historia original. Aunque como buena 'fan-fiction' que es también esta serie, el protagonista no puede evitar enamorarse de la invasora.

Lost in Austen - Persiguiendo a Jane AustenEsta serie debe ser tratada y vista bajo un punto de vista paródico y dejándose guiar por sus guiños. Así, el que espere una nueva actualización de Orgullo y Prejuicio se puede llevar a engaño. Eso sí, y por sorprendente que parezca, las localizaciones, escenarios, vestuarios e incluso actitudes de algunos personajes, pueden resultar más cercanas a la novela que en otras adaptaciones. Así, Mr Darcy, es un tipo arrogante y orgulloso de su estatus, que cree estar por encima, con cierta vulnerabilidad pero evitando mostrarla, algo que vemos en la novela, pero que en las últimas adaptaciones parecía haberse relajado.

Dicho esto, también no dejará de sorprender el planteamiento original de algunos personajes, que se mueven por otros motivos, como Caroline Bingley, Georgiana Darcy o una humanizada señora Bennet, con la que se podría empatizar, pero que conserva cierto punto del personaje original. George Wickham es quizá uno de los personajes más sorprendentes, pues aún siendo un vividor, su simpatía y cambio de personalidad, es quizá uno de los puntos a aplaudir, pues resulta una brisa de aire fresco para los que ya conocen la trama.

Lost in Austen - Persiguiendo a Jane AustenPero estos personajes no serían nada sin los actores que van detrás. Así, especialmente, Hugh Bonneville (Mr Bennet), Alexis Kingston (Ms Bennet), Elliot Cowan (Darcy), Gemma Atterton (fugaz Elizabeth) o Tom Riley (Mr Wickham) resultan ideales en sus papeles y una se preguntaría como sería una versión fiel con estos actores que tan bien han hecho su trabajo. La protagonista principal Jemima Rooper (Amanda Price), representa bien su papel, como chica posmoderna y un poco atolondrada, que suspira más por lo que significa el amor en la novela que en las adaptaciones. Como ella misma dice, 'no es Colin Firth, son Darcy y Lizzy', ante una madre desencantada por su propio desastre amoroso.

Pese a esto, la producción no está exenta de sus errores. A las incongruencias del peinado o ropa con los que aparece Amanda en Longburn, también hay inexactitudes históricas, que quedan quizá escondidas por una buena producción y ambientación. El humor quizá debería ser menos grueso y cercano a la ironía de Austen, y la trama puede estar demasiado acelerada o cercana al melodrama tópico al final. Esto, junto con la nula interacción de Elizabeth y la debilidad de la premisa del viaje 'dimensional', podrían ser los motivos de disgusto, en una serie cuya única pretensión es acercarse a un clásico desde un punto de vista renovado y quizá más respetuoso que otras versiones.

Lost in Austen - Persiguiendo a Jane AustenPero estos 'defectos' disminuyen al ver la multitud de 'guiños' que la serie va haciendo: desde una Amanda con el 'Orgullo y Prejuicio' de Carl Davis en su móvil, hasta actuar como Fanny Price al ser la espectadora-protagonista de la historia, pasando por una escena 'posmoderna' de Darcy en el lago, que Bingley sea regañado de una forma Knightleana ('Mal hecho, Bingley, mal hecho'), o que la historia y sus puntos principales consigan suceder de forma alocada. Por no decir por momentos tan 'surrealistas' como ver a Mr Darcy haciendo comentarios racistas sin deserlo en un autobus, que coja un Teletubbie o Elizabeth le enseñe por Internet, quien debería ser realmente.

Así, si se ve la serie con una mirada amplia y sin prejuicios, 'Lost in Austen' es un entretenimiento divertido, especialmente para los fans de las comedias románticas, donde la protagonista en el fondo, lo que desea realmente es trascender a esa realidad mundana que la rodea, de la que es parte, pero de la que le gustaría salir. Además, resulta divertido descubrir un entretenimiento que combina la novela más popular de Jane Austen, con una fantasía de 'puertas encantadas', donde la protagonista mete la pata en su intento por conseguir la realidad de la novela, como si fuera uno de esos personajes de ciencia ficción, que hace más daño al intentar corregir lo que le rodea, que dejándolo tal y como es. Siendo lo más increíble que pese a los cambios de actitud e historia, es más fiel y conecta mejor con el público que algunas versiones históricas pero modernizadas para conectar con el espectador.

Lost in Austen - Persiguiendo a Jane Austen

Por lo tanto, 'Lost in Austen' es una serie recomendable, un experimento para ver sin prejuicios, para entretenerse con los amigos austenitas y disfrutar de una comedia contemporánea con un punto de partida y escenarios totalmente diferentes. Eso sí, que no esperen la sutileza de Austen, y no recomendada para fans de Lizzy Bennet.

Historia

Enlaces